Ayer me fui con una compañía bien agradable a Peratallada. El día anterior, casualmente, vi una pequeña montaña (por llamarla de alguna manera) al lado de uno de los aparcamientos de la entrada del pueblo y me dije "aquí vengo mañana!". Preparé unos bocadillos, unas croquetas, una bolsa de patatas, algo de bebida, una toalla grande y todo en la mochila y para allá que nos vamos! Llegamos por las cuatro de la tarde. Nos sentamos en ese pequeño montículo, bajo una olivera, sacamos la comida y a disfrutar. De vez en cuando teníamos que vigilar alguna hormiga curiosa... pero eso no me impidió disfrutar del sol filtrado por la sombra de nuestro árbol y del suave airecito que mantenía una buena temperatura. Una vez terminado, recogimos bien y nos relajamos escuchando los pájaros, intentando distinguir unos de otros y también los distintos árboles que había (pinos, oliveras y algún otro que no supimos....)
Para hacer la digestión, un paseo por el casco medieval de Peratallada. Es más grande de lo que me pensaba...pero bonito y tranquilo (en este mes) como imaginaba. Y al otro lado de la carretera está la iglesia de la cual solo pudimos ver la fachada pero que me resultó curiosa.
Me dio un poco de dolor de cabeza (creo que por el sol...) y nos volvimos a casa no si antes pasar por una cafetería a hacer un café con leche rápido, mi vicio!
Tiempo: 2h o más, según se quiera.
Dificultad: nada!
Material: toalla grande, algo de comer y beber, mochila y ropa cómoda.
Nota final: 7
